CASA GARRET

 

Se trataba de la reforma de una vivienda para un habitante en el barrio malagueño de La Lagunilla. La vivienda pertenece a un bloque plurifamiliar situándose en su planta tercera, que es la más alta. Sus superficies son de 42 m2 útiles y 24 m2 de terraza.

 

La vivienda original se correspondía con la de un piso de un dormitorio al uso, teniendo una distribución en la que la posición del único dormitorio en el centro de la planta bloqueaba la percepción espacial y obligaba a unos recorridos internos excesivamente sinuosos.

 

El proyecto propuso una apuesta por la diafanadidad, eliminando o transformando todas las particiones innecesarias. Se favorecía de esta manera una visual de 11 m desde la entrada hacia el cierro, permitiendo así observar la copa de un gran ficus que se encuentra en la calle. Esta vista se complementa con la que se consigue también desde la entrada hacia el patio, pudiéndose ver incluso los montes de Málaga. La cocina fue reubicada, siendo la primera estancia que se nos muestra, rodeada de planos de madera, intentando no percibirse justo al entrar pero tampoco queriendo ocultar su presencia abierta a la vivienda. El dormitorio, con su esquina curva que favorece la continuidad, se reduce a un mínimo que recoja el lugar de descanso abriendo su techo para integrarse con la estancia principal.

 

Mayores visuales, espacios no clausurados, interrelación visual y potenciación de la continuidad espacial son las apuestas de esta nueva vivienda para un habitante.